Fatiga pandémica

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Editorial

Desde aquel martes 3 de marzo 2020, cuando en Chile se confirmó el primer caso positivo de Covid-19, el país ha vivido más de 14 meses en un ir y venir de informaciones, balances, Cuarentenas, Transiciones, avances y retrocesos…

Vemos en las noticias los detenidos en fiestas clandestinas, que la reducción de movilidad es casi inexistente en las comunas en Cuarentena, como Linares por cerca de 80 días, o Curicó que por estos días cumple dos meses en el Paso 1.

Tenemos cifras récord en los permisos, colectivos e individuales. El cansancio de estos 14 meses viviendo en “modo Covid”, con temores, restricciones y distanciamiento social, ya pasan la cuenta. Y están generando resistencia a las medidas sanitarias que obliga la emergencia. De todo esto se desprende la fatiga pandémica y estas son seis de sus representaciones más comunes.

Rebeldía. Se está dando en la población un análisis de que los costos de la pandemia “son mayores al riesgo de la exposición al virus” y que eso hace que tomen decisiones que no apuntan a las recomendaciones ni a los factores protectores “por deseos de más libertad”.

Menor percepción de riesgo. El temor a contraer el virus y contagiar a los cercanos han sido los bastiones de la estrategia para prevenir el aumento de casos y mantener las medidas de autocuidado. Pero en 14 meses de pandemia, la premisa ha ido perdiendo fuerza.

Hastío. El encierro y las restricciones que se profundizan, como el toque de queda, prohíben, precisamente, las actividades que nos balancean la vida hacia la salud mental y eso está pasando la cuenta.

El dolor del duelo. Frente a las cifras, empieza a desaparecer la capacidad de asombro. Y por supuesto que en las actuales circunstancias, muchas personas no han podido hacer el duelo que necesitan cuando fallecen personas cercanas.

Trastornos de la conducta. Las personas están sufriendo más ansiedad, estrés y otros trastornos debido a las restricciones de la pandemia y al no tener una “vida normal”, como la de antes.

Protestas por restricciones. Estas manifestaciones se han visto en otros países, como Argentina, Estados Unidos y España, exigiendo liberar a la ciudadanía de las restricciones impuestas por los gobiernos.