Mujeres que cumplen condena en el Centro Penitenciario Femenino de Talca pudieron trabajar para empresa agrícola

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Gendarmería Maule y la empresa Copefrut, ubicada en la provincia de Curicó, firmaron el respectivo convenio de colaboración durante el año pasado.

Buenos resultados. Grupo pudo trabajar en una de las líneas de proceso de la citada firma, desde el mismo recinto penal.

CURICÓ/TALCA. Las oportunidades laborales escasean, cuando se trata de una persona que ha sido condenada por algún delito. Lo que genera, según los expertos en la materia, un círculo vicioso, en donde muchas de ellas, no logran encontrar un trabajo para comenzar de nuevo al salir en libertad.
Es en esta búsqueda de alternativas para las personas que se encuentran en proceso de reinserción social, surge una iniciativa conjunta entre la Dirección Regional de Gendarmería Maule y la empresa Copefrut ubicada en la provincia de Curicó, quienes firmaron un convenio de colaboración el año pasado, que dio como resultado que un grupo de mujeres que cumple condena en el Centro Penitenciario Femenino de Talca (CPF), trabajara en una de las líneas de proceso de esta compañía desde el mismo recinto penal.

EVALUACIÓN
Respecto a la evaluación de esta iniciativa, se refirió el director regional de Gendarmería Maule, coronel Rubén Pérez Riquelme. “Gendarmería es seguridad y reinserción, desde esa perspectiva para nosotros es muy importante que se celebren, estas alianzas con la empresa privada, en este caso Copefrut, una empresa importante del rubro. Estamos felices, esperando que sirva de incentivo y buen ejemplo como motor de cambio para el resto de la población penal y también una muy buena señal para la sociedad, de que hay personas que, sí quieren reinsertarse en la sociedad”, dijo.
Sobre este mismo tema se refirió, Carlos Leal, jefe de Desarrollo de Personas de Copefrut. “Este convenio con Gendarmería, ha sido muy importante para Copefrut, estamos muy contentos del trabajo realizado, y esperamos seguir ampliando el programa y beneficiando a más mujeres privadas de libertad, porque creemos en la reinserción como una herramienta fundamental para el desarrollo de las personas y de la comunidad”, acotó.

PROCESO
El proceso en el que participaron cuatro privadas de libertad del CPF de Talca, fue en el armado de productos semi elaborados de la línea de envases, los que eran provistos por la empresa Copefrut, a las internas, y ellas a su vez, devolvían estas cajas armadas y listas, para ser ocupadas como envase de los productos que se exportan. “Como institución estamos muy agradecidos de la apuesta que hizo Copefrut, en pensar que la reinserción social, es posible, a través de puestos de trabajo. Así que, estamos disponibles para generar nuevas conversaciones y establecer acciones futuras que vayan en beneficio, tanto de nuestras usuarias del CPF de Talca, como de otros centros de Gendarmería”, indicó por su parte, la encargada regional de los Centros de Educación y Trabajo (CET) de Gendarmería Maule, Cindy Sazo Ramos.

TESTIMONIO
Marina Wolff, una de las internas participantes de este proyecto abordó lo que fue su experiencia en lo laboral. “Se pasa el tiempo más rápido al uno estar ocupada. Y muy bueno para la reinserción laboral, ya que, cuesta mucho al salir de acá. Todo lo que he ganado (ingresos) lo ahorro (….) Yo no soy chilena, todo lo he guardado para cuando salga (…) Se necesitan más oportunidades, más puestos laborales. La gente al salir no le dan oportunidades. Uno queda con el conocimiento (capacitaciones) para seguir afuera”, puntualizó.
Finalmente, como una forma de seguir fortaleciendo esta alianza, la empresa Copefrut, invitó a parte del equipo de profesionales de Gendarmería Maule (Cindy Sazo, coordinadora regional CET y Felipe Lagos, profesional apoyo CET regional), a una visita en terreno para conocer la empresa y el proceso del que, por primera vez, fueron parte mujeres privadas de libertad.