Académico de la Universidad de Talca. Sostuvo que, en el contexto de elecciones, las mujeres son “mucho más eficientes y existe solidaridad de género”.
TALCA. La asunción del nuevo gobierno, encabezado por el Presidente, Gabriel Boric, trajo consigo una serie de cambios respecto, por ejemplo, de la conformación del gabinete de ministros, ministras, subsecretarios y subsecretarias.
El común denominador es el perfil de las nuevas autoridades, más jóvenes, con mayor presencia femenina (con una mujer en Interior, Izkia Siches, la primera en la historia).
Para el académico del Centro de Análisis Político (CAP) de la Universidad de Talca, Mario Herrera, se trata de un importante recambio generacional de la política, con renovación de figuras, partidos, profesiones, orígenes geográficos y principios valóricos. Eso es lo observado en el Gabinete Ministerial de la nueva administración, asumida el 11 de marzo reciente.
De acuerdo al experto universitario, los nuevos secretarios y secretarias de Estado “representan una completa renovación de la política”, que se diferencia de las generaciones anteriores en muchas de sus características.
Su origen geográfico, de paridad de género, de términos simbólicos, de diversidad profesional, uso de nuevas tecnologías y edad de sus integrantes, son algunos de los sellos que marcan a estos nuevos líderes gubernamentales, de acuerdo a Herrera.
“En el Gobierno se incluyeron personas no solo de Santiago, aunque la meta de la paridad entre la capital y regiones no se cumplió. Pero sí hubo un esfuerzo por incorporar elementos de descentralización”, precisó el académico.
Además, se trata de un gabinete feminista. “El Presidente privilegia a las mujeres por sobre los hombres, muy en la línea de lo que hizo Michelle Bachelet en su primer mandato”, señaló.
“A esto se suma que tenemos una Ley de Paridad de Género en el Congreso y una Convención Constitucional que fue electa por paridad”, sostuvo.
El académico señaló, además que, es importante indicar que en el contexto de elecciones las mujeres son “mucho más eficientes y existe solidaridad de género”. Un futuro presidenciable podría surgir de este gabinete, y si hay más mujeres, “podría haber más chance de una candidata”, precisó.
SÍMBOLOS
En otro ámbito, el analista político destacó los símbolos expresados tras la designación de los y las ministras. “Hay algunos ministerios, como el de Defensa, que ocupa una profesional que es familiar del Presidente Salvador Allende, y otro, el del Interior, donde asumió por primera vez una mujer. Otra imagen potente es la incorporación del Ministerio de la Mujer y de la Equidad de Género en el comité político”, valoró. “Estos son símbolos de una renovación generacional, que era lo que estaba pidiendo la gente. Y esa fue una de las razones por las que Gabriel Boric ganó las elecciones, porque es el representante del cambio”, indicó Herrera.
Por otra parte, se observa, de acuerdo al analista, una mayor diversidad profesional. “Los ministros están asociados más a un perfil técnico. También existe una mayor diversidad respecto a las universidades de origen y sus profesiones. Estábamos acostumbrados a que predominaban los ingenieros civiles, comerciales y abogados, que ocupaban cerca del 60% del total de las carteras”, sostuvo.
NATIVOS DIGITALES
Otro atributo del gabinete es que en su mayoría son nativos digitales, ya que ocupan tecnologías, redes sociales y nuevos canales de comunicación. “Lo que se produce allí es el cambio de la relación entre el representante y el representado. Entre los ministerios y las personas que atiende. Ya no se espera solo que los ministerios ocupen y usen las redes sociales, sino que cambie la forma en que se van a relacionar con sus audiencias y públicos”, manifestó.
Sin embargo, la pregunta que queda por responder, de acuerdo a Herrera, es si ésta será una renovación de los políticos en particular o una renovación de la política en general.
“¿Es necesario tener nuevos rostros para una renovación de la política? Sí, es necesario, pero no es suficiente. Lo que importa son las prácticas. Lo peor que podría suceder es que salieran los rostros antiguos y entraran caras nuevas, pero con las mismas prácticas de siempre”, finalizó.