Así lo informó el abogado de las familias, Rafael Poblete, quien detalló que los especialistas incluyen un ingeniero en construcción naval, un mecánico y un experto en accidentes marítimos.
CONSTITUCIÓN. A casi un mes de la desaparición de los siete tripulantes de la lancha Bruma, y luego de la despedida a los pescadores las familias continúan exigiendo verdad y justicia.
Ello luego que tras una reunión con la fiscal Marcela Cartagena, decidieron reforzar su propia línea de investigación contratando un equipo de peritos particulares, que trabajará en paralelo a las diligencias del Ministerio Público.
Así lo informó el abogado de las familias, Rafael Poblete, quien detalló que los especialistas incluyen un ingeniero en construcción naval, un mecánico y un experto en accidentes marítimos. “Los peritos fueron contratados para saber qué pasó realmente el 30 de marzo”, indicó.
En la cita con la fiscal, los familiares pudieron acceder a registros en video que muestran movimientos del buque Cobra, embarcación cuya tripulación está siendo investigada en el marco del caso. Estos registros, que circularon previamente en redes sociales, refuerzan las sospechas que las familias ya venían manifestando desde hace semanas.
CARTA
Hace días, publicaron una carta pública cuestionando la actitud de los tripulantes del Cobra, acusando que “no estarían cooperando activamente” con la investigación. La respuesta por parte de los trabajadores de Blumar no se hizo esperar. A través de un comunicado, afirmaron vivir “días de mucha incertidumbre y angustia” y denunciaron ser víctimas de estigmatización.
Sin embargo, las declaraciones no convencieron a las familias, quienes acusan inconsistencias en los relatos. “Para cooperar activamente se requiere decir toda la verdad desde un primer momento, sin ocultar ni omitir nada”, sostuvo el abogado Poblete. Apuntaron también contra el gerente de Blumar, Gerardo Balbontín, por entregar versiones contradictorias sobre lo ocurrido, señalando que en primera instancia negó cualquier incidente, pero luego admitió que los tripulantes “sintieron un ruido”.
Las dudas se profundizaron tras la muerte de Juan Sanhueza, vigía del Cobra, quien “desapareció misteriosamente” antes de declarar ante la Fiscalía. En la carta, los familiares sugieren que los tripulantes fueron reunidos previamente por la empresa, lo que “pudo contribuir a que se construyere un pacto de silencio”.
QUERELLA
Por otra parte, una querella por homicidio con dolo eventual en contra del capitán del barco Cobra interpusieron los familiares de los pescadores de la lancha Bruma, aún desaparecidos en el mar.
De acuerdo a la querella ingresada por las familias de los pescadores, se busca la responsabilidad penal del capitán de la embarcación industrial de Blumar, el Cobra, por lo que, exponen, fue su rol fundamental en la serie de acciones y negligencias que llevaron al hundimiento de la lancha artesanal Bruma.