Oficiada por monseñor Galo Fernández. Como es tradición, las personas llegaron a dejar flores y pasar un tiempo cerca de los seres queridos que han fallecido.
CURICÓ. Con una misa en el Cementerio Municipal de Curicó, ayer miércoles 1 de noviembre se celebró el Día de Todos Los Santos, solemnidad cristiana que fue encabezada por el obispo de Talca, monseñor Galo Fernández y donde decenas de personas pudieron recordar con esta ceremonia religiosa a sus seres queridos que ya descansan en el recinto de calle Freire. A la misa llegó el alcalde Javier Muñoz, concejales y otras autoridades, quienes participaron de manera solemne en este rito católico. Por su parte, monseñor Fernández agradeció a Dios que se pudiera realizar esta ceremonia tradicional, oportunidad en la que también se pidió por la unidad en el país. Al camposanto llegaron cientos de personas a depositar flores para sus seres queridos, en un recinto que amplió su horario de atención para que las personas tuvieran la oportunidad de asistir sin que se generaran grandes aglomeraciones.