Tras alcanzar su máxima capacidad. Hasta el cierre de esta edición, comunidades en torno al río Maule se mantenían en alerta.
COLBÚN. Desolador es el panorama que se registra en el Maule Sur como consecuencia del violento temporal de viento y lluvia que afecta a la zona central del país y que provoca dolor y angustia en miles de familias que han sufrido las consecuencias del fenómeno climático que se extendería hasta mañana.
Uno de los hechos que provocó enorme preocupación fue el vertimiento de aguas desde el embalse Colbún, que hasta el cierre de esta edición registraba un aumento en el curso de agua del río Maule y que mantenía en estado de alerta a sectores poblados que se ubican en las riberas del río Maule en localidades como: Bobadilla, San Javier, Maule, Pencahue y Constitución.
En San Javier, una de las zonas de mayor riesgo es la población Piloto Pardo, donde algunas familias decidieron la evacuación, en tanto que otras se albergaban en los segundos pisos de sus viviendas,
EVACUACIONES
Los mensajes del sistema SAE fueron insistentes en términos de llamar las comunidades a evacuar por el peligro de desbordes debido al notable aumento del caudal.
En Constitución dada la alerta de emergencias de evacuación de Senapred alrededor de 50 pacientes, internados en el hospital, fueron trasladados a otros centros asistenciales. Se indicó, que el servicio de urgencia sigue funcionado, pero se trasladó al centro de Salud Familiar Cerro Alto.
EMERGENCIAS
De la misma manera varias lanchas en el río Maule resultaron con graves daños por efecto de la crecida del río. El Parque Fluvial tenía al límite su capacidad, con serio riesgo de desborde por las subidas de mareas y el aumento del caudal por el vertimiento de aguas desde el embalse Colbún. Si bien el embalse Colbún se encontraba cerca de 20 metros bajo su cota máxima antes de las actuales precipitaciones, las condiciones climáticas excepcionales de lluvias con altas temperaturas impidieron la acumulación de nieve, llevando a un aumento en los caudales del río Maule a niveles mucho mayores de los habituales.
La situación fue debidamente informada a las autoridades y comunidades respectivas, a través de equipos en terreno, y monitoreada en forma permanente, estableciéndose además todas las coordinaciones necesarias según los protocolos vigentes.