Evitar problemas. El año pasado murió una persona en Molina y se denunció que le impidieron el ingreso a un recinto oficial.
CURICÓ. Controversia generó el deceso de un hombre que vivía en la calle y que, presuntamente, se le impidió ingresar a un albergue habilitado por el Gobierno en la comuna de Molina. El hecho se produjo en agosto del año pasado y en ese el recinto se dijo que había una Cuarentena por Covid-19, lo cual fue desmentido por la seremi de Salud y se abrió una investigación.
Para evitar casos como el ocurrido el 2022, las autoridades anunciaron la implementación oportuna de albergues durante este invierno, tomando en cuenta que comenzaron las bajas temperaturas en la zona central del país.
La seremi de Desarrollo Social, Sandra Lastra, afirmó que pronto se abrirán seis recintos en la provincia, de los cuales cinco se habilitarán en Curicó. “Tres de ellos están a cargo de instituciones privadas (dos con la ONG Alta Tierra y uno con el Hogar de Cristo) y dos de la municipalidad. El alcalde Javier Muñoz nos ha solicitado hacerse parte de este proceso de instalación”, indicó.
En contacto con diario La Prensa, la funcionaria de Gobierno agregó que el otro albergue estará en Molina. “Va a funcionar con la ONG Abriga un Hermano, también se firmaron los convenios y estamos a la espera que pueda abrir las puertas para que las personas en situación de calle puedan hacer uso de esos espacios”, dijo.
La autoridad sostuvo que “el ministerio de Desarrollo Social ha revisado los lugares donde se van a instalar los albergues, los que cumplen con las condiciones exigidas. Vamos a estar haciendo todas las supervisiones, de tal forma que no tengamos dificultades y que las personas se sientan protegidas y seguras”, sostuvo.
ABRIR A TIEMPO
Recordar que el año pasado hubo otra polémica con la habilitación de un albergue en Molina. En esa oportunidad, la consejera regional Giovanna Paredes subió videos a las redes sociales, donde el inmueble habría iniciado su funcionamiento en medio de trabajadores que estaban arreglando algunos problemas de infraestructura, lo cual fue rechazado por el seremi de Desarrollo Social de la época.
Paredes espera que este año todo funcione como corresponde. “El año pasado los albergues se abrieron en una fecha que era muy tarde (agosto-septiembre) y, además, muchos de ellos en una situación bastante paupérrima, que no cumplía con las condiciones”, precisó.
Agregó que puso los antecedentes a disposición de la Contraloría y el compromiso es que este primer semestre “se van a ir a verificar y se van auditar todos los albergues gubernamentales. El compromiso de la nueva seremi de Desarrollo Social es que este año se van a abrir los albergues ahora en mayo, que es cuando realmente se necesitan”.
De hecho, contó que este jueves se inaugurará el albergue de Molina y “sabemos que cumple con las condiciones que se necesitan para cobijar a toda la gente que está en situación compleja o situación de calle”.