Operativo. Tras una inspección, se pudo establecer que mantenía en su interior solo “vestimentas de mujer”.
CURICÓ. Expectación entre quienes a esa hora circulaban por el centro de la ciudad, generó la presencia de una mochila de color negro, que fue abandonada a un costado de las oficinas de una estación de servicio, ubicada en la esquina de la avenida Camilo Henríquez con calle Carmen.
Tras el aviso a Carabineros, que fue efectuado por el propio administrador del recinto, personal de dicha institución dio curso al protocolo de rigor para casos de tal naturaleza, aislando el sector donde estaba la mochila, interrumpiendo con ello el tránsito, tanto vehicular como peatonal, esto a la espera del arribo de personal especializado del GOPE, quienes se trasladaron desde la ciudad de Talca, haciéndose cargo del operativo.
En el intertanto se generó una importante congestión en varias calles de la zona céntrica de Curicó, esto ante los desvíos que se ejecutaron.
ENSERES PERSONALES
Según lo dado a conocer por el capitán de Carabineros, Héctor Fuentes, por la fecha que ayer se conmemoraba, es decir, el tercer aniversario del denominado “Estallido Social”, al administrador del aludido recinto le habría llamado la atención la presencia de la “abandonada” mochila, lo que lo motivó a contactarse de manera telefónica con la citada policía.
Pasadas las 13:30 horas de ayer, portando la indumentaria y los elementos de rigor, funcionarios del GOPE se acercaron a la mochila, confirmando que en su interior no mantenía ningún tipo de elemento peligroso, es decir, “químicos o explosivos”, solo enseres personales, los que, por sus características (vestimentas), corresponderían a una mujer.
Por lo mismo, se indicó que no fue necesario realizar una “detonación controlada”, ya que la mochila “no revestía mayor peligro”. Tras ello, el tránsito vehicular volvió a estar expedito.