Esperan que su uso se mantenga en el ámbito de la salud. Por ahora, lo único “claro” es que en dicho recinto se quedará el SAMU, un jardín infantil y que se deberá reabrir la calle Membrillar.
CURICÓ. Junto a la interrogante ligada a la “apertura definitiva” del que será el nuevo Hospital para Curicó, otra duda que aún no ha sido dilucidada dice relación al destino que tendrá el actual recinto, ubicado en calle Chacabuco a pocos metros de avenida San Martín, una vez que precisamente se inaugure el edificio ubicado a un costado de la población Sol de Septiembre. Ante la consulta de diario La Prensa, el director del Hospital de Curicó, Mauro Salinas Cortés, recalcó que, por ahora, las únicas “certezas” que existen sobre el recinto de emergencia son tres: se quedará el SAMU, red que pertenece al Servicio de Salud del Maule (SSM), la cual recordemos, es la encargada de coordinar las ambulancias. “Eso va a estar en un sector del antiguo hospital donde estaba anatomía patológica”, dijo. Junto con ello, Cortés confirmó la permanencia del jardín infantil “Los Siete Enanitos”. Por último, dijo, se deberá concretar la reapertura de la calle Membrillar, espacio que, recordemos, fue utilizado tras el terremoto acaecido en 27 de febrero del 2010. Recalcó que existe el “compromiso” de volver a abrirla aquel tramo de dicha arteria a uso público, para lo cual ya está en curso un estudio de ingeniería en manos de profesionales de la municipalidad. Cabe recordar que se trata de una intersección “estratégica”, puesto que la calle Membrillar, que tiene sentido hacia el sur, concentra el recorrido tanto de micros como de colectivos que se trasladan hacia la zona surponiente de la ciudad, teniendo como única alternativa para seguir aquel destino, “bajar” por la avenida San Martín, hasta la calle Yungay. Además, en avenida San Martín se “topa” la locomoción que viene desde el surponiente y que va hacia el corazón del denominado “casco histórico” de Curicó. Si a eso le sumamos los automóviles que vienen desde la Alameda Manso de Velasco que optan por “entrar” al centro utilizando dicha calzada, y el aumento natural del parque automotriz en las “horas punta”, resulta inevitable no verse enfrentado en dicho tramo, como conductor o pasajero de la locomoción, a algún episodio de congestión vehicular. Por ahora, todo lo demás corresponden a “ideas” o proyectos que están en carpeta, sin una mayor definición.
IDEAS “SUSTENTABLES”
Independiente de que el actual escenario presenta mayores “incertidumbres”, según lo manifestado por el director del hospital, Mauro Salinas, lo importante es que los proyectos que se puedan desarrollar, una vez que se concrete el traslado al nuevo edificio, necesariamente deben tratarse de ideas que sean “sustentables” en el tiempo, ojalá además ligadas al ámbito de la salud. “Hay unos focus group bien interesantes, de hacer un SAR, de hacer un Cesfam, pero tienen que ser estudiados, que sean sustentables en el tiempo”, dijo. “Hay varias ideas, pero un concepto que es fundamental es que cualquier idea que esté asociada a salud, sea sustentable en el tiempo. Eso como primera cosa (…) Hay un edificio que todavía se puede ocupar, el objetivo nuestro es que sea destinado para salud y que sea sustentable”, recalcó.