Panorama. Debido a falta de agua, siembras han disminuido en 40% en la región y agricultores deben hacer turnos para regar. Dirigente pide política de Estado para el agro.
TALCA. El presidente de la Asociación Agrícola Central, Luis Urrutia, entregó un crudo panorama del agro regional producto de la sequía y si bien reconoce que este rubro está en “tratamientos intermedios”, descarta escasez de alimentos.
¿La agricultura regional ha ido evolucionando o está en franco retroceso?
“La agricultura ha tenido que enfrentarse a los cambios globales, que son los desafíos que enfrentamos actualmente; se ha tenido que ir adaptando y en ese proceso se vuelve competitiva y la competencia no necesariamente viene dada por la competencia interna, que ya es compleja, sino a la externa. Somos un país largo, con un clima privilegiado, con barreras sanitarias que cualquiera lo quisiera, pero somos intensivos y hacemos poca agricultura y esa poca agricultura que hacemos en pocos territorios, tiene que competir con una agricultura extensiva, a menor costo, de países que son mucho más productores de cereales, como por ejemplo Brasil y Argentina, que son potencia dentro del volumen que producen, pero de bastante menor calidad (en relación a lo que se produce en Chile)…y ahí está el desafío, que es el de la tecnología (que se requiere tener en el país)”.
¿Aún una agricultura conservadora, sin adaptarnos a lo que hacen otros países?
“Los agricultores hemos sido bastante innovadores; para competir hemos tenido que viajar, importar productos tecnológicos a un elevado costo. La agricultura ha crecido, porque nos hemos tenido que adaptar; el agricultor ha tenido que innovar… La agricultura tiene que ser más tecnológica y ahí están las universidades que deben hacer algo también, investigar cómo salimos adelante y por eso debe existir una política de Estado en que nos ponga a todos a jugar dentro de la cancha y darnos condiciones. La tecnología ha estado, los agricultores han hecho el esfuerzo, pero sería muy distinto con una política de Estado”.
¿Cree que las universidades regionales han estado ausentes del tema agrícola?
“Siento que todas han estado haciendo un esfuerzo, porque también compiten, al igual que nosotros en el campo, y siento que están a la altura, pero distinto sería, por ejemplo, que en esta política de Estado la agricultura fuera esencial y estratégica y ponernos a trabajar en conjunto para preguntarle al campo qué necesita, qué está perdiendo, qué tipo de técnico capacitar para que el campo sea más productivo y ahí nos falta que nos ocupemos de la educación rural, para que esa persona encuentre en el campo y en su entorno capacidad de desarrollo para surgir…”.
Si tuviéramos que hacer un diagnóstico médico a la agricultura, considerando todos los problemas que tiene, pero en especial la falta de agua ¿en qué etapa se encuentra; en la UTI o UCI?
“En Tratamientos Intensivos; no hay agua en Pencahue, en los ríos hay turnos de riego, con cinco días sin regar y solo dos con agua. Se sabía que este año iba a ser complejo y no tuvimos la forma de revertirlo y lo que acordaron los agricultores fue tratar de hacer turnos, pero no sabemos hasta cuándo podemos estar repartiendo agua en estanques, con un gasto y desgaste logístico tremendo y no estamos haciendo el esfuerzo por tener tranques, que es lo que nos falta… La agricultura está en riesgo y también nuestra alimentación si no hacemos algo y eso va de la mano con políticas de Estado, con invertir en tecnologías, pero para almacenar agua para el momento de riego para producir alimentos y si alguien hace mal uso del recurso que sea sancionado”.
CULTIVOS
Frente a la escasez hídrica, ¿se han visto en la disyuntiva de tener que elegir qué y no sembrar?
“Este año, de un promedio de 10 hectáreas, hubo que dejar cuatro fuera; es decir, el 40% de la producción bajó para privilegiar los suelos más productivos y también las zonas en que el agua pudiese llegar en este racionamiento y, efectivamente, se hicieron mucho menos hectáreas de arroz, de maíz, trigo”.
Entonces, ¿habrá escasez de alimentos con esas hectáreas menos de siembra?
“Creo que no, pero puede ser traducido en alzas de precios y por eso es necesario que tenemos que autoabastecernos, no (significa) proteger o cerrar el mercado, sino darnos la seguridad de alimentarnos y cuando eso esté cubierto, con productos de calidad, a buen precio, de ahí en adelante sigamos viendo cómo lo hacemos. La Región del Maule representa el 50% de todo lo que se pueden imaginar de comer sobre la mesa y nos debemos sentir orgullosos, pero también debemos sentirnos responsables y cómo somos competitivos para que el retorno para el agricultor sea mayor”.
¿Qué productos agrícolas podrían escasear más?
“Estamos preparados en superficie para que no escasee (un producto determinado), porque tenemos la condición de los acuerdos de importación, por tanto, si tenemos una cuota que baja la vamos a importar, a buen precio, pero la mirada es qué debemos hacer para que eso no ocurra y a nadie le falte un plato de alimento”.