No miente. En medio de la controversia que causó el caso, el abogado Óscar Echeverría fustigó a las autoridades de Salud y aseveró que la familia es “muy cristiana”, por lo que no miente. También contó que la “paciente cero” está casada con un pastor en Estados Unidos, y que tiene una vida espiritual “muy activa”.
SANTIAGO/SAN JAVIER/TALCA. Óscar Echeverría, el abogado de la “paciente cero” de la variante Delta en Chile, levantó dudas sobre que su representada haya tenido esa cepa de la Covid-19.
En conversación con Radio Bío Bío, el profesional, que es el marido de su hermana y el conductor que la llevó de Santiago a su casa en la comuna de San Javier, repasó paso a paso cada movimiento de la mujer desde que esta llegó al país, asegurando que tiene documentos para probar todo.
“Lo único que no tengo es algo acerca del resultado de variante Delta, que tenemos que solicitar que se haga lo antes posible, antes que salga de su organismo”, señaló.
“Me atrevo a decir públicamente que no tiene la Delta en su cuerpo, sino que fue un error involuntario del laboratorio”, añadió.
En medio de la controversia que causó el caso, Echeverría fustigó a las autoridades de Salud y aseveró que la familia es “muy cristiana”, por lo que no miente.
También contó que la “paciente cero” está casada con un pastor en Estados Unidos, y que tiene una vida espiritual “muy activa”.
Es decir, al abogado “no le calza” que alguien del grupo familiar haya mentido, algo que contravendría su espiritualidad.
MINSAL SABÍA
El abogado Echeverría indicó, además, que el Ministerio de Salud (Minsal) sabía que ella iría al funeral, donde recalcó que no se mintió, como acusó la seremi de Salud del Maule, Marlenne Durán.
“Siempre (se le dijo a la autoridad) y tenemos cada correo donde se señala ‘por favor, solicito permiso para asistir al funeral de mi papá””, añadió.
“Mi representada llegó a Chile con PCR negativo y una vez que llega al aeropuerto es controlada por el Minsal”, remarcó Echeverría.
“Le hacen un PCR y la envían el mismo día a una residencia sanitaria de Santiago”, añadió.
Tras recibir otro resultado negativo, la mujer partió a San Javier durante la madrugada del 5 de junio.
Aquello, relató Echeverría, gracias a un permiso humanitario para el que tuvo que acreditar PCR negativo.
Allí, el jurista relató que entrando al cementerio le llegó un correo electrónico con un certificado, a las 13:42 horas, el que permitía un traslado entre ambas ciudades.
“Cuando se encontraba en el cementerio llega el certificado y además de señalar que la pasajera se dirige al domicilio, se señalan los datos del conductor (él) y las personas que viven en el domicilio”, complementó.
“Por lo tanto ellos se enteraron que estaban en Cuarentena una vez que ya se encontraban en el cementerio, por tanto el comunicado llegó tarde y fíjate que cuando la paciente sale de la residencia no le dan ningún permiso”, profundizó.
“Si bien la pasajera se dirigió al funeral, jamás se hizo con propósito de dañar a alguien”, sostuvo el abogado.
Luego agregó que la mujer desconocía que tenía esa variable de la enfermedad, si es que la tuvo, y volvió a subrayar que el viaje se hizo con permiso de la autoridad sanitaria.
Actualmente, reveló Echeverría, la mujer está en una residencia sanitaria, “tratando de salir adelante” después que el caso se haya vuelto tan mediático. Aunque tiene un pasaje de regreso comprado, no tiene apuro de retornar hasta que esto se aclare.
Finalmente en la entrevista, Echeverría indicó que la mujer accedió a una dosis de la vacuna de Johnson & Johnson el día antes de viajar a Chile. (Fuente www.biobiochile.cl)