Preocupación. La educación juega un papel fundamental para cambiar esta situación, que afecta a un número importante de mujeres.
CURICÓ. Durante estos días, han salido a la luz situaciones de violencia entre parejas que son conocidas en medios de comunicación y redes sociales, y que han generado impacto en la comunidad. Pero estas trascienden la pantalla y forman parte de la cotidianeidad de un número importante de mujeres.
De acuerdo al informe denominado “Décima Encuesta Nacional de las Juventudes”, el 17,5 por ciento de los jóvenes declararon haber sufrido algún tipo de violencia en su relación de pareja, cifra que aumenta hasta el 18,1 % en el caso de las mujeres.
“En nuestra región, el incremento de la violencia ha sido significativo, muy similar a la situación nacional”, planteó Claudia Morales, seremi del Servicio de la Mujer y Equidad de Género (Sernameg); quien mencionó además que estos datos podrían evidenciar que existen más acciones denunciantes.
“Esto nos lleva a suponer que la sociedad está más activa y que asume de una manera eficaz la violencia, por lo tanto, está denunciando y visibilizando más las agresiones hacia las mujeres”, expresó Morales.
Para la autoridad regional, existe un cambio en la sociedad que ha llevado a visibilizar que las conductas violentas son anormales y que los conflictos deben resolverse de mejor manera.
CONDUCTAS
En tanto, la sicóloga Lilia Morales Díaz, señaló que actualmente la mujer tiene un rol más protagónico que hace algunos años y, por lo tanto, existe mayor concientización respecto a los derechos que ellas tienen. Esto queda en manifiesto con el actuar de las chicas más jóvenes, que tienen más claridad respecto a cuáles son los límites que deben poner en sus relaciones de pareja.
También la profesional hizo hincapié en que las redes sociales afectan las relaciones. Esto porque muchas veces se establecen prohibiciones para alguno de los integrantes de la pareja. Y además influyen algunos patrones de conducta aprendidos por generaciones.
“Existen diversas situaciones que pueden gatillar los conflictos en una pareja. Y muchas veces, existen modelos de violencia que están internalizados en estas”, enfatizó Lilia Morales.
EDUCACIÓN
Para la sicóloga, es importante que los padres presten atención al comportamiento que tienen sus hijos con sus parejas. Y en ese sentido, las familias deben destinar tiempo a la conversación con estos.
“Deben poner atención a la forma en que se relacionan sus hijos con las parejas. Esto es, si se hacen respetar o ponen límites con estas”, enfatizó Lilia Morales, quien añadió que la educación también juega un papel fundamental en esta problemática.
Una opinión similar entregó la seremi de Sernameg, quien hizo hincapié en la importancia de impartir una instrucción sin estereotipos de género. “Es relevante trabajar con la comunidad educativa, incluyendo a padres, madres y adultos significativos y avanzar hacia una formación con la capacidad de gestionar nuestras emociones, reconocernos y aceptarnos como somos, que todos y todas podemos contribuir a nuestra educación”, enfatizó.
“MODELO PATRIARCAL”
En tanto, Claudia Morales manifestó que estamos insertos en un modelo patriarcal, que genera formas de relacionarse al interior de las familias.
“Es por ello que aún seguimos teniendo esas maneras de vincularnos en forma desigual. Desde el interior de la familia y, en todos los espacios públicos, siempre nos relacionamos desde quien ejerce la subordinación y la persona que se deja someter. De ahí que existe la vulnerabilidad y discriminación y, sobre todo, la violencia contra mujeres, niños, niñas, adultos mayores y personas que presentan alguna discapacidad”, añadió.
Morales indicó además que debemos progresar hacia una tipificación de la violencia que sufren las niñas y adolescentes con la finalidad que puedan recibir asesoría jurídica y sicológica de manera institucional.