Belén Farías. Psicóloga especializada en apego y trauma complejo expuso sobre este complejo tema en Molina.
MOLINA. Para la psicóloga especializada en infancia, Belén Farías es imposible pedir una crianza respetuosa a una madre o padre que haya sido víctima de un trauma en su infancia. Y que es en la adultez donde luego se reflejan las consecuencias y enfermedades que dificultan a una persona víctima de traumas o malos tratos en su niñez, poder desenvolverse en su vida.
Estas y otras materias fueron parte de la charla “Una ventana hacia nuestros niños, sensibilización en apego y trauma en la infancia”, dictada en el Teatro Municipal de Molina.
Ser una sobreviviente de un cáncer, motivó a esta profesional a exponer y visibilizar estas temáticas del trauma complejo en la infancia, puesto que es en la adultez donde luego se reflejan las consecuencias que dificultan a una persona desenvolverse de modo normal en su vida y en sus relaciones.
“Yo misma sufrí varios traumas en mi infancia, y esto está relacionado en la vida adulta con la aparición de enfermedades autoinmunes y el cáncer a temprana edad por eso la motivación de hablarlo”, relató la psicóloga en su exposición.
LA CRIANZA
Para la profesional especializada en apego y trauma complejo, la presencia verdadera del o la adulta responsable, es lo más importante para la vida de niños y niñas, puesto que es lo que más contribuye a regularlos en su conducta y aprender a autorregularse también, “lo anterior nos exige estar como padres y madres ‘presentes de verdad’, no solo acompañar a nuestros hijos e hijas y estar por ejemplo conectados al celular o a las redes sociales al mismo tiempo”, explicó.
Madre de tres niños y miembro además de Casa Azul de la comuna de Molina, Belén Farías expuso que es imposible pedir una crianza respetuosa a una madre o padre que haya sido víctima de un trauma en su infancia.
La charla abordó que muchos niños y niñas que sufren traumas suelen llevar hacia su interior lo que sienten, sin expresarlo ni exteriorizarlo, lo que conoce como la dimensión internalizante, aunque será una situación latente que de alguna manera se expresará.
CONSECUENCIAS DEL TRAUMA EN LA INFANCIA
Según estudios citados por la experta, Chile registra un grave problema de salud mental infantil, hecho que impactará negativamente en los próximos años, con altos niveles de depresión, costo en atención de salud, producción económica, entre otros. Se habla de una infancia triste con graves consecuencias como el suicidio y lesiones que están en aumento en el país.
En este escenario, la importancia del apego seguro entre madres y padres hacia sus hijos e hijas es relevante, puesto que desde que nacemos necesitamos el cuidado de otros, y el no conectarnos con otros en la infancia está demostrado que podría atrofiar partes del cerebro que luego repercuten negativamente en la adultez.
En el caso de niños y niñas que son víctimas de malos tratos y otras formas de abuso por parte de integrantes de sus familias o adultos significativos, es la forma más dañina de un apego desorganizado, puesto que quienes deberían darles cuidado y protección, son al mismo tiempo quienes les agreden y lastiman.
“Lamentablemente en nuestro país está normalizado el maltrato infantil”, a opinión de la psicóloga. “Lo vemos a diario en un supermercado, en las calles, afuera de una tienda, etc., porque muchas personas adultas creen que es normal dar un tirón de pelo, de orejas y maltratar psicológicamente a un niño o niña con palabras o ideas que les denosta u ofende como persona”, expresó en la charla. Lo grave -agregó Farías- es que cuando estos maltratos son reiterados y diversos, se genera el trauma infantil que marca la vida de aquella persona hasta su adultez.
El trauma infantil son historias muy dolorosas, aunque los espacios de contención pueden contribuir a resolver en parte la vida de quienes lo sufren o lo han sufrido, enfatizó la profesional.
Según la experta, “para sanar el cuerpo del trauma debemos conectar con el cuerpo, y estar atentos a qué aspectos gatillan el trauma con la fe de que los vínculos los podemos sanar”.