Es virtualmente imposible saber el porcentaje de personas serias que opinan, con criterio y de manera sensata, sobre la realidad de la crisis sanitaria mundial pues –con el correr de los meses– se van presentando frecuentes cambios y factores variables, que incluso asombran y confunden hasta a los investigadores y científicos más calificados a nivel internacional.
Dejemos de lado, por ahora, a los ignorantes que hablan por hablar y a los cuales habría que sumar los “conspiranoicos”, que andan inventando todo tipo de hipótesis absurdas y también a los que aún dudan de la veracidad de la pandemia o culpan –sin fundamento alguno– a algunos líderes de opinión o a personajes famosos
Lo cierto es que los escenarios están variando notoriamente y, por ejemplo, mientras la tercera ola del coronavirus se está empezando a controlar en España, e incluso algunas comunidades autónomas ya relajan medidas de restricción, abriendo bares, restaurantes, cafeterías o retrasando el toque de queda, varios expertos ya advierten que la próxima explosión de contagios está a punto de llegar.
El epidemiólogo estadounidense Michael T. Osterholm –que en 2017 fue quien vaticinó la pandemia de Coronavirus en su libro “La amenaza más letal”– ahora dice que la cuarta ola llegará en marzo y que será mucho peor que la tercera.
Este experto ha expuesto sus teorías en varios medios europeos y explica que su preocupación viene sobre todo por la mayor capacidad de contagio de la variante británica, que será la cepa causante de la cuarta ola en muchos países.
“Las nuevas variantes han cambiado las reglas del juego y tenemos que respetar esta realidad y entender lo que significa”, ha advertido Osterholm.
Además, el epidemiólogo también deja claro que solo está teniendo en cuenta la variante británica, pero que si a este vaticinio se sumaran la cepa brasileña o sudafricana los resultados podrían ser todavía peores.
Eso sí, este experto se muestra optimista con el funcionamiento de las vacunas y ha instado a los gobiernos a “acelerar todo lo posible las campañas de vacunación”.
Todas estas proyecciones dan a entender que tendremos pandemia para un rato más largo de lo que pensamos.