Postura. Recalcó que como autoridad comunal insistió en reiteradas oportunidades que el Municipio interpusiera acciones legales, por el maltrato animal que se presentaba en el recinto ubicado en el sector Vista Hermosa, lo cual se ejecutó solo cuando aquel espacio fue desalojado.
CURICÓ. Durante la más reciente sesión del concejo, el área jurídica del municipio llevó a cabo una presentación respecto a la causa por maltrato animal, ligada al caso de un refugio que se habilitó en dependencias de una antigua escuela del sector Vista Hermosa, caso que, por su crudeza, alcanzó una connotación de carácter nacional.
Si bien, argumentando “falta de legitimidad activa”, el 15 de noviembre pasado, la respectiva querella fue declarada “inadmisible” por el Juzgado de Garantía de Curicó, durante el citado concejo, integrantes de la Dirección Jurídica del municipio recalcaron que dicha causa “sigue vigente”, dando cuenta de las acciones que ahora están en curso.
Cabe señalar que el municipio presentó dicha querella, por maltrato animal, el 22 de febrero del año en curso, dirigida tanto hacia la figura de Susana Padilla Aránguiz (persona que estaba a cargo del refugio) como hacia “todos quienes resulten responsables”. Debido a las “paupérrimas condiciones de higiene, seguridad y de salud” en las que permanecían los animales que estaban en aquel lugar (en su mayoría, perros), durante el pasado mes de febrero se concretó el desalojo del “refugio”.
INSISTENCIA
La edil Paulina Bravo (PR) fue una de las integrantes del concejo que tomó la palabra para referirse a dicho tema. Señaló que desde que fue electa, comenzó a insistir en “que se hiciera algo”, sobre todo ya que le habían llegado comentarios respecto a “malversaciones económicas” por parte de quien estuvo a cargo del cuestionado refugio, es decir, Susana Padilla.
Respecto al tema de los maltratos hacia los animales, dijo que ya en agosto del año pasado, en el portal habilitado por el municipio para hacer denuncias, una persona había compartido una imagen donde se observaban animales visiblemente desnutridos.
“Desde ese momento yo comencé a insistir de que la municipalidad pusiera una denuncia por maltrato animal, cosa que no sucedió hasta que fue el desalojo”, indicó. “Me preocupa que no lo tomemos con la gravedad que significa. La Municipalidad fue cómplice, es tan cómplice como Susana (Padilla). Disculpen que lo diga, porque nosotros facilitamos un espacio donde aportamos recursos municipales y donde nunca se fiscalizó pese a todas las denuncias”, acotó.
NO FUE ESCUCHADA
Durante tal instancia, la aludida concejala también señaló que en “muchos concejos” pidió ser informada respecto a los avances que tenía el proceso judicial vinculado a la querella que fue presentada, sin obtener respuesta. “Se hizo hasta una marcha a mediados de año, porque la comunidad quería saber en qué iba el proceso. Entonces no escuchamos antes, no escuchamos ahora”, dijo. Junto con ello, señaló que, durante el último concejo del mes pasado, en su calidad de autoridad comunal, solicitó la realización de un “sumario interno” para “esclarecer” dicha situación.
TRAUMA
Recordó Bravo que para varias personas, ir al lugar a fin de brindar asistencia a los animales les generó un verdadero “trauma”. De hecho hubo varios casos en los que debieron recurrir a una ayuda de carácter psicológica. “Los arreglos, las mejoras y las cosas que se hicieron, los exámenes a los perros, todo eso nació y se hicieron con recursos de la comunidad”, subrayó.
Por último, lamentó que el municipio no tuviera “la capacidad para anteponerse a los hechos”, a pesar de los antecedentes y las advertencias que circulaban. “Hablo porque me preocupan ciertas circunstancias que son graves y que, si las escuchamos en el momento que corresponde, no estaríamos lamentando o siendo funados en redes sociales o saliendo en los medios de comunicación al final como incompetentes todos nosotros”, cerró.