Proyecto diseñado por el municipio. El recinto lleva por nombre “Gómez-Salinas”, en homenaje a habitantes del lugar que hicieron historia para la población.
MOLINA. Una emotiva ceremonia vivieron los vecinos de la villa General Maturana de Molina, con la inauguración oficial de una icónica plazoleta en el sector.
El recinto público lleva por nombre “Amado Gómez y Manuel Salinas”, rindiendo un justo homenaje a históricos habitantes del lugar por su aporte a la vida comunitaria.
La iniciativa pudo ser concretada gracias a un proyecto diseñado por el municipio y financiado por el Programa de Mejoramiento Urbano (PMU) de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), entidad que aportó más de 60 millones de pesos para su ejecución.
RECONOCIMIENTO A VECINOS
La alcaldesa de Molina, Priscilla Castillo, destacó la importancia de esta obra, ya que “es una villa bastante antigua, de las primeras que ha tenido Molina y era muy importante hacer ese sueño realidad, puesto que los vecinos del lugar nos pidieron remodelar esta plazoleta. Para ello, postulamos a fondos de la Subdere y nos ganamos los recursos, por lo que también damos las gracias al equipo municipal que preparó el proyecto e hizo el proceso de licitación para que todo se desarrollara de la mejor forma posible”.
Agradeciendo el trabajo mancomunado con el municipio, Cristina Cáceres, presidenta de la Junta de Vecinos Gabriela Mistral, destacó las comodidades con las que cuenta ahora el espacio, recordando que “nosotros teníamos un área verde que estaba bastante seca, pero ahora está acondicionada para los residentes, con asientos, mayores áreas verdes y juegos deportivos para ellos. Contenta por este logro, gracias a la alcaldesa Priscilla Castillo y a los vecinos que están presentes, como también a los hijos de las personas cuyo nombre lleva la plazoleta, que se llama Gómez-Salinas”.
Visiblemente emocionado, Edgardo Gómez Leyton, hijo de Amaro Gómez, tuvo especiales palabras al ver materializado el reconocimiento que entrega Molina a sus destacados ciudadanos, señalando que “en el momento, cuando habló la presidenta de la Junta de Vecinos, me emocioné por mi padre. Él era un hombre muy correcto en la vida, nos crió con gran sacrificio. Fue un ejemplo no solo para nosotros como familia, sino que también para el Cuerpo de Bomberos, donde dejó un legado muy bonito”.