Qué se debe hacer. Según la profesional frente a la sospecha, consultar precozmente, o frente al diagnóstico confirmado, hay que mantener la terapia de manera continua a lo largo de la vida, para poder manejar las situaciones que puedan presentarse.
TALCA. Hace algunas semanas un hombre de 35 años, estuvo en coma inducido en la ex Posta Central por beber 20 litros de agua. Lo que le provocó, una baja extrema en sodio (hiponatremia) y un edema cerebral, pero finalmente, el 11 de febrero, fue dado de alta en buenas condiciones.
Todo comenzó cuando los doctores de Francisco Lamatta, quien está diagnosticado con un cuadro de Trastorno del Espectro Autista (TEA) le suspendieron la ingesta de bebidas colas ante un inminente riesgo de diabetes por su alto consumo (tres litros diarios). Ante esto se enfocó en tomar agua en exceso.
La familia cortó el suministro hídrico de la casa para evitar que siguiera bebiendo más de lo necesario. A pesar de la medida, una noche, mientras todos dormían, encontró bidones con agua y los bebió de forma excesiva.
Para hablar sobre este tema, conversamos con la neuróloga infantil, Paulina Alid, integrante del Colegio Médico (Colmed) del Maule . Es que para ir avanzando como sociedad es importante descubrir aquello que se desconoce, como lo es el TEA, y darle un espacio también a la “neurodiversidad”.
Lo primero que queremos saber es si este comportamiento es habitual en personas con Trastorno del Espectro Autista.
“No es habitual ni frecuente de ver. La verdad es que podríamos asumir que la conducta compulsiva podría haber tenido como causa el diagnóstico del autismo, pero desconocemos otras antecedentes de este paciente con mayor precisión”. Pero hay que dejar en claro que tampoco es una conducta frecuente”.
¿Y cuáles son las características principales de los pacientes con este diagnóstico?
“Presentan un conjunto de síntomas en común. Donde, hay alteraciones del lenguaje, en la comunicación, en la socialización, y además tienen patrones de conducta estereotipados, y repetidos, con algunas alteraciones del procesamiento sensorial. Entonces se describe que efectivamente hay un patrón de conducta algo obsesivo dentro de algunos pacientes, los cuales tienden a ser perseverantes y reiterativos en algunas conductas.
Claramente esto depende del nivel de desempeño de desarrollo de cada paciente, porque como lo decía al principio en este caso desconocemos otros diagnósticos de esta persona. Por lo tanto, podría tener su origen en esta parte de las conductas estereotipadas, y patrones de conductas repetitivos, el cuadro que se relata en este adulto”.
¿Se pudo haber evitado esta conducta, que tuvo un desenlace tan delicado?
“Quizás sí, desde el punto de vista de la supervisión, teniendo en cuenta algunas medidas mayores de restricción desde el momento en que uno logra pesquisar una alteración, desde el punto de vista conductual. También desde lo farmacológico se pudo haber modulado. Pero la verdad, desconocemos si es que este paciente está con algún tipo de tratamiento. Esto ocurrió en la noche, no es criticable ni cuestionable la situación, porque a lo mejor en horas de la noche donde todos descansaban, se realizó esto y sin que nadie se diera cuenta”.
¿Qué se puede hacer en caso de una descompensación?
“Frente a las descompensaciones los pacientes son muy distintos unos de otros. Desde lo que es la evaluación de los profesionales que están con el niño, ya sea el terapeuta ocupacional, el psicólogo, psiquiatra, neurólogo, y fonoaudiólogo, pueden ver cuáles son las mejores estrategias para un paciente u otro. En general, no hay una receta única que pueda definir como hacer la regulación, más que dejarlo en un ambiente que sea de contención emocional, con elementos de agrado, que sea un ambiente acogedor que lo logren cambiar desde el punto de vista sensorial, y emocional. Y las preferencias de cada paciente son distintas. Mientras a un paciente, el abrazarlo, el hacerle cariño, puede empeorar la situación, en otros pacientes si puede lograr contenerlos y calmarlos. Aquí lo importante es frente a la sospecha, o al diagnóstico confirmado, mantener la estrategia de terapia de manera continua a lo largo de la vida, para poder tener en cuenta el cómo manejar las situaciones, porque cada paciente varía frente a sus características personales”
¿Ha aumentado los diagnósticos de autismo?
“Sí, han aumentado significativamente, este aumento de casos viene desde antes de la pandemia, es algo que está reportado. No se debe solamente al mayor conocimiento, y es por eso que es tan importante estar muy pendiente del desarrollo neurológico de los niños. Estar atentos a los signos de alarma, porque aunque no sabemos la causa del aumento de los casos, sí sabemos que el inicio de un tratamiento y una terapia de manera precoz es el mayor impacto positivo que se puede dar al pronóstico”.