Proyecto. Se trata de un antiescaldante natural, que evita formación de manchas pardas en piel de estas frutas.
Talca. La Universidad de Talca logró su primer licenciamiento internacional con el desarrollo de una tecnología para la conservación de frutas pomáceas, como manzanas y peras, como parte de su trabajo de transferencia tecnológica desde la academia y que aporta a la agroindustria.
La invención controla el escaldado superficial de las frutas, un problema que se produce por el frío al que se ven expuestas durante su guarda posterior a la cosecha.
El innovador producto es generado con un lípido natural que se encuentra en las plantas, y fue desarrollado en los laboratorios de la Universidad de Talca por la investigadora Carolina Torres, quien actualmente es Profesora Asociada y “Endowed Chair” en sistemas de postcosecha de la Universidad del Estado de Washington en Estados Unidos.
“Esta tecnología se aplica posterior a la cosecha y previo a la guarda en frío a la que se someten en todo el mundo las peras y manzanas, previniendo un desorden fisiológico muy devastador en estos frutos, lo que genera un daño cosmético que hace que la fruta no pueda ser comercializada”, explicó la académica. “Queremos producir un cambio positivo y buscar soluciones que finalmente sean aplicadas en la industria y mejoren su competitividad”, manifestó.
“Como Universidad, hemos avanzando potenciando la innovación y transferencia tecnológica, y esperamos que este licenciamiento internacional sea el primero de otros procesos que nos acerquen todavía más a la industria”, afirmó el rector, Álvaro Rojas.
LICENCIAMIENTO
Know Hub Chile gestionó que el licenciamiento llegara a la multinacional AgroFresh. Su director ejecutivo, Javier Ramírez, señaló que “ello ha permitido ampliar y profundizar las capacidades y competencias para apoyar los procesos de identificación, valorización, protección y comercialización de los resultados de investigación, a través de la transferencia de conocimiento, implementación de herramientas y generación de redes y vínculos”.
Para evitar el escaldado, la industria de las pomáceas ha generado una serie de tratamientos químicos, pero que tienen problemas algunos de ellos porque son cuestionados en la normativa internacional o bien porque bloquean la maduración y calidad de las manzanas y peras. Por ello, la tecnología creada es una solución integral, que busca solucionar el problema a base de materias naturales.