Tras impacto del más reciente sistema frontal. Julio Nazar docente de la Facultad de Arquitectura y Arte de la Universidad del Desarrollo, abordó además las posibles soluciones que podrían implementarse a futuro.
SANTIAGO. Hace pocos días, varias ciudades de Chile se vieron afectadas por fuertes inundaciones ocasionadas por intensas lluvias. Ante esta situación, el académico de la Facultad de Arquitectura y Arte de la Universidad del Desarrollo, Julio Nazar, ha compartido su perspectiva sobre el impacto que los temporales tienen en las ciudades, además de abordar las posibles soluciones que podrían implementarse en el futuro.
¿Qué tan preparadas están las ciudades de Chile para aguantar las consecuencias de la lluvia?
“Debido a la violencia con la que se están presentando los nuevos episodios de lluvias en el país, las ciudades chilenas están demostrando que no están 100% preparadas para absorber estas eventualidades. Las ciudades han crecido sin respetar la memoria del territorio, se han expandido en general, sin crear la infraestructura suficiente para manejar el drenaje de agua. Las ciudades han acabado convirtiéndose en grandes cubiertas que han impermeabilizado el suelo y minimizado la capacidad del territorio para absorber la lluvia. Cada avenida, cada construcción, cada edificio, cada estacionamiento que creamos, va restándole superficie para que el agua lluvia pueda ingresar al suelo de manera natural. Por el contrario, está agua termina escurriendo y eso termina afectando a nuestras ciudades”.
¿Qué tipo de daños puede dejar una inundación en la ciudad?
“Los daños que puede dejar una inundación en la ciudad son muy diversos. Van desde el colapso de la red vial, que obviamente puede generar congestión, hasta la misma infiltración de viviendas y todas las edificaciones que terminan afectando la calidad de vida de los habitantes. Todo esto en definitiva tiene un costo económico muy alto que alguien tiene que responder, empezando por el Estado, para paliar los problemas que esto genera”.
¿Qué tipo de trabajos se pudieron haber hecho en las ciudades para evitar inundaciones?
“Lo que se puede hacer ahora es cambiar el discurso y en vez de pensar en la lógica de la intubación y de la canalización cerrada como se hacía hace 100 años, hay que pensar en una estrategia mucho más ‘esponja’. Para que el agua de lluvia, en lugar de ser desplazada hacia un nuevo destino, sea infiltrada, sea permeada en la zona verdes, en los parques, cambiando el diseño de nuestras redes viales, incorporando pavimento mucho más poderoso, al mismo tiempo respetando y mejorando el manejo de nuestras zonas naturales, humedales, quebradas, ríos y acequias como verdaderas fuentes de captura de estas aguas lluvias”.