Tampoco tiene el carácter de VIP. Abogado Alonso Basualto señaló que un grupo de jóvenes se instaló en el lugar para rescatarlo, porque el Ministerio de Bienes Nacionales nunca se preocupó de administrarlo.
TALCA. El abogado Alonso Basualto, quien representa a particulares que realizaron una ocupación en la playa de Maguillines en este balneario, aseguró que no se trata de una “toma” y que tampoco tiene el carácter de VIP.
El lugar está en una disputa judicial y ha considerado el desalojo de lo que ahí ha sido construido.
“Es una ocupación que se hizo de un terreno de propiedad fiscal, que estaba absolutamente abandonado y en condiciones perjudiciales para el desarrollo de la sociedad, refugio de personas indeseables socialmente, en circunstancias de que es un predio de propiedad fiscal, respecto del cual el organismo público encargado por la ley de subtenencia y administración, que es el Ministerio de Bienes Nacionales, nunca cumplió con su función de administrarlo; desde ese punto de vista mis representados, que son un grupo de jóvenes oriundos de Constitución, deportistas y ecologistas, se instalaron en el lugar para rescatarlo”, dijo ayer el profesional al noticiario “Pauta Informativa” de Atentos Chile y radio Marisol.
El abogado agregó que el lugar tuvo en su momento el apoyo “no formal de la Municipalidad y del alcalde anterior”, y que luego, por otras razones vinculadas con la empresa privada, la ocupación de sus representados se complicó.
“Tenemos una serie de acciones judiciales y lo otro que nos respalda, es que esta no es una situación en la que se esté desconociendo un derecho de terceros ni el derecho fiscal; esa propiedad está inscrita a nombre del Fisco de Chile, eso nunca se ha desconocido y se ha tratado de mantener en condiciones favorables a la comunidad, de manera que toma no es y VIP tampoco. No hay lugares de lujo, son construcciones menores, provisorias, no hay segundas viviendas; hay una actividad comercial menor, que en alguna medida ha sido comunicada a la autoridad”, explicó.
UTILIDAD
Explicó que el dueño del terreno es el Fisco de Chile, pero que siempre ha estado ausente… “La administra el Presidente de la República, a través del Ministerio de Bienes Nacionales, pero el Ministerio no tiene la tenencia y no la ha ejercitado, no conoce los deslindes, de manera que a quién mis representados debieron pedirle permiso… (el terreno) no tenía ningún titular, y se destinó a un fin público conocido que no es atentatorio contra los intereses de la comunidad”.