Por informaciones confusas. A pesar de la magnitud de la crisis hídrica que enfrenta la región, por el momento no hay cortes ni racionamiento de agua en localidades rurales ni sectores urbanos.
TALCA. La seremi de Obras Públicas, Claudia Vasconcellos, llamó a continuar los esfuerzos para enfrentar la crisis hídrica que se extiende en el Maule, propiciando el cuidado del agua para el consumo humano y el desarrollo de la actividad productiva de la región con planes especiales en las cuencas y el mejor funcionamiento de los sistemas de Agua Potable Rural (APR).
“El agua es un bien cada vez más escaso y todo indica que esta situación se seguirá intensificando en el tiempo, por eso debemos entre todos aportar con el cuidado de nuestros recursos disponibles. En este sentido, el MOP a través de la Dirección de Obras Hidráulicas está desarrollando planes estratégicos para el uso eficiente de las cuencas e inversión extraordinaria para enfrentar la sequía como en 2021 donde se invirtieron del orden de los 5 mil millones de pesos en estudios hidrogeológicos y la construcción de sondajes para las localidades que presentan mayores dificultades como es el caso del sistema Potrero Grande de Curicó donde en los próximos meses se habilitará un nuevo pozo para asegurar el abastecimiento de agua para los vecinos”, señaló la autoridad.
SISTEMA DE AGUA POTABLE RURAL
La región cuenta con 301 sistemas de APR donde cada comité se organiza para la mejor gestión y el MOP aporta con la infraestructura y asistencia técnica necesaria para la conservación, mejoramiento y ampliación de las redes de distribución del agua.
El programa de agua potable del MOP está a cargo de la Subdirección de Servicios Sanitarios Rural (SSR) con proyectos relevantes como son el Sistema Duao Lipimávida que abarca parte de las comunas de Licantén y Vichuquén, Queri, Bajos de Lircay y Las Lomas de San Clemente, Orilla de Purapel de San Javier, Las Hornillas hacia Porvenir, La Unión San Víctor Lamas, Llepo Peñasco y Pejerrey Los Hualles de Linares, Lomas de Machicura de Parral, Bajo Esmeralda de Yerbas Buenas, El Plumero de Rauco y Molino Ventana del Alto de Teno, entre otros.
Hay sistemas que están siendo reforzados por los municipios con camiones aljibes como son el caso de Nirivilo, Huerta de Maule y Luis Cruz Martínez de San Javier, Rabones en Colbún, Santa Margarita en Río Claro, Lora en Licantén y Pahuil de Chanco.
Los principales embalses continúan aportando en sus funciones de riego y generación eléctrica registrando Laguna del Maule un 25% de su capacidad, Ancoa 59%, Digua 23%, Bullileo 43%, Colbún 71%, y Tutuvén de Cauquenes con un 12%.
“Estamos enfrentando un escenario histórico de escasez con medidas inmediatas, de corto, mediano y largo plazo y a la fecha hemos logrado asegurar el agua en las ciudades, apoyando el abastecimiento en el sector rural, e impulsando los estudios necesarios para la construcción de nuevos embalses”, concluyó la seremi, Claudia Vasconcellos.
A la fecha, Chile completó 13 años consecutivos de sequía en la zona norte y centro sur y el 2021 fue el cuarto año más seco desde que se tienen registros.
El escenario hídrico más crítico está entre las regiones de Atacama y La Araucanía donde habita el 85% de la población.