
LINARES. Amanda Leiva, una niña de solo 6 años que hoy lucha por su vida contra un neuroblastoma etapa IV, un cáncer agresivo que en Chile no tiene tratamiento disponible.
Su madre, Lidia Monroy, inició el pasado 9 de diciembre un desgarrador camino desde Chillán hasta Santiago, buscando respuestas, apoyo y recursos.
Lo hace con el dolor de una madre, pero también con la fuerza y sacrificio de quien no está dispuesta a rendirse. Su meta: reunir más de 1.000 millones de pesos, monto necesario para que Amanda pueda acceder en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona a una inmunoterapia que representa su única posibilidad real de sobrevivir.
El informe médico internacional confirma que la droga Naxitamab, aprobada por la FDA, podría lograr la remisión de la enfermedad.
Pero su costo es inalcanzable para cualquier familia.
El consejero regional Alamiro Garrido hizo un llamado a las máximas autoridades regional, a parlamentarios y a todos los maulinos: “No puede ser que en pleno 2025 las madres y padres de nuestro país deban caminar, cruzar ciudades y tocar puertas para pedir que sus hijos tengan acceso a tratamientos vitales. Chile necesita leyes sólidas, un sistema eficiente y un financiamiento real para enfermedades catastróficas. No podemos seguir mirando hacia el lado”, manifestó.
En ese contexto, Garrido fue enfático al señalar que “Amanda nos necesita hoy, no mañana. Este es un caso que debe unirnos como país”.
Asimismo, invitó a seguir las redes oficiales de la campaña “Unidos por Amanda” en Instagram y Facebook, y a sumarse a las distintas instancias de apoyo y donación para que la pequeña pueda viajar y recibir el tratamiento que podría salvar su vida.
“Las niñas y niños de Chile merecen vivir. Amanda merece vivir. Hagamos lo imposible posible”.


