Durante los últimos días, las regiones de O’Higgins y Maule han enfrentado condiciones complejas debido a las altas temperaturas y el viento, lo que ha favorecido el avance de incendios forestales.
TALCA. Debido a una intensa ola de calor que afectará al país, en las próximas horas, se determinó la activación del Botón Rojo, un sistema que permite anticiparse a escenarios de alto riesgo y reforzar la protección de las comunidades y el entorno natural.
Durante los últimos días, distintas regiones del país han enfrentado condiciones complejas debido a las altas temperaturas y el viento. En este contexto, la activación del Botón Rojo fue clave para coordinar acciones preventivas, especialmente en comunas como Pichidegua, en la Región de O’Higgins, donde un incendio de gran magnitud obligó a evacuar preventivamente a cerca de 400 personas y afectó más de 160 hectáreas.
Una situación similar se registró en la comuna de Maule, donde el avance del fuego provocó una de las emergencias más complejas de los últimos días. Las llamas arrasaron con más de 1.200 hectáreas de bosques, matorrales y pastizales, generando un grave impacto ambiental y poniendo en riesgo a numerosas comunidades rurales del sector.
El incendio no solo afectó extensas áreas de vegetación, sino que también provocó daños en viviendas y bodegas, aumentando la preocupación de los vecinos y obligando a las autoridades a desplegar un amplio operativo de emergencia para proteger a la población y evitar una mayor propagación del fuego.
¿QUÉ ES?
El Botón Rojo es un sistema tecnológico predictivo creado en 2018, diseñado para identificar territorios con alta probabilidad de ocurrencia o propagación de incendios forestales. Su objetivo principal es anticiparse a los riesgos, permitiendo que las instituciones actúen de manera oportuna y coordinada.
Este sistema analiza variables clave como: temperatura; velocidad del viento; humedad y presencia de combustible fino muerto en bosques, matorrales, pastizales, cultivos y humedales
¿CUÁNDO SE ACTIVA?
El Botón Rojo se activa cuando la probabilidad de ignición alcanza o supera el 70%, junto con vientos de al menos 20 km/h, condiciones que aumentan considerablemente el riesgo de incendios.
¿CUÁL ES SU OBJETIVO?
Su finalidad es apoyar la planificación y prevención, reforzando patrullajes, acercando recursos terrestres a zonas críticas y suspendiendo temporalmente el uso de maquinaria agrícola y forestal mientras la alerta esté vigente.
Gracias a esta herramienta, en los últimos meses se han logrado identificar más de una decena de zonas de potencial peligro entre las regiones de Coquimbo y Ñuble, fortaleciendo la capacidad de respuesta y cuidando tanto a las personas como al medioambiente.
El Botón Rojo no solo es una alerta: es una muestra de cómo la tecnología, la prevención y el trabajo conjunto pueden marcar la diferencia frente a las emergencias.