Cielos despejados, estadio lleno y colorido albirrojo en el estadio municipal de Molina para una nueva versión del clásico maulino, que tuvo un golazo, expulsados en ambos equipos y disturbios tras el pitazo final en zona de camarines y en galería.
POR RODRIGO ORELLANA SALAZAR
FOTO RICARDO WEBER FUENTES
MOLINA. Complicado primer tiempo para Curicó Unido que llegó más al arco rival pero que lamentó terminar abajo en el marcador. Minuto 7 y Felipe Ortiz con un remate de media distancia avisó en el arco rival, aunque el balón terminó ancho por la portería de José Luis Gamonal. El partido era parejo, sin embargo, en una rápida pelota de ataque, Matías Sandoval controló con dirección al arco de Tomás Vergara y sacó un zapatazo alto que infló las mallas curicanas para un sorpresivo 1 a 0 a favor de Rangers.
A los 28’ Rangers otra vez avisó con un tiro libre de Carlos Lobos que esta vez embolsó el portero curicano y al minuto siguiente Joaquín González respondió con otro tiro de media distancia que sería a la larga la principal carta de ataque de Curicó Unido en este primer tiempo.
El Curi buscaba la igualdad, lo merecía, y a los 34’ tras tiro libre de Yerko Leiva un cabezazo anticipando de Ian Aliaga pasó rozando al travesaño talquino. A los 38’ otra vez Curicó se aproximó con Carlos Herrera y un tiro de media distancia por poco desviado, a los 46’ a borde externo el que intentó fue Quinteros y un minuto después, ya en los descuentos, un desvío de cabeza en área chica de Joaquín González pudo ser la igualdad, a no ser por la gran reacción de José Luis Gamonal.
Llegó más a fondo el Curi, sin embargo, terminó abajo en el marcador, en la quizás única llegada visitante que selló de gran forma el atacante Sandoval.
EXPULSADOS
En el segundo tiempo, Curicó Unido mantuvo la tónica de protagonismo. Leiva, al minuto 53, con un tiro de media distancia encendió nuevamente alarmas en el arco visitante y sería Rangers, en todo caso, a los 71 minutos, con tiro libre de Carlos Lobos quien pudo marcar el gol de la tranquilidad, aunque la pelota se estrelló en el poste izquierdo de Vergara.
El juego se enredó para Curicó a los 79’ con la expulsión de Carlos Herrera y recién en los descuentos la intensidad se apropió del encuentro, aunque por la nueva expulsión, esta vez del ingresado Agustín Mora en Rangers, y por una bataola en camarines donde hubo encontrones entre jugadores de ambos bandos, lo que provocaría que se exaltaran los ánimos desde la galería y algunos hinchas forzaran una reja para meterse a un tumulto donde nunca debieron estar.
La intervención de carabineros evitó algún episodio mayor, mientras pedradas a la salida del estadio fueron protagonistas de un clásico que se manchó por el mal comportamiento de jugadores y algunos hinchas luego de la derrota curicana frente a un Rangers, que se posiciona buscando un cupo en la liguilla y ante un Curicó que se estanca en la parte baja con un entrenador que aún no puede celebrar un triunfo desde su llegada.