Son ocho los temas musicales clasificados, caracterizándose por la variedad de estilos, motivaciones y procedencia geográfica.
MOLINA. Dando realce a las tradiciones, el XLVII Festival Folclórico de la Vendimia de Molina anuncia una reñida competencia para elegir a la mejor canción inédita del 2025.
Son ocho los temas musicales clasificados, de entre más de 200 participantes, caracterizándose por la variedad de estilos, motivaciones y procedencia geográfica.
AMPLIA GAMA MUSICAL
Es así como, por ejemplo, Paul Castán (autor de “Noche de abril”) buscará encantar con un ritmo foxtrot representando a la localidad de Casablanca, Región de Valparaíso. “Desde hace mucho tiempo sabíamos de la existencia del Festival de Molina y de su relevancia para el desarrollo del folclor a nivel nacional. Sabíamos que, como grupo, en caso de quedar seleccionados, tendríamos un gran momento artístico y fomentaríamos nuestro crecimiento ante uno de nuestros mayores desafíos como músicos”, dijo el artista.
Por su parte, el santiaguino Nibaldo Mateo, creador de “Vals para María Isabel”, afirma ser un músico atípico con influencias de Osvaldo Jeldres, dedicando su canción “a mi hija María Isabel y describe la alegría de un padre que espera con mucha ilusión la llegada de ese ser que cambiará su mundo para siempre”.
En tanto, Eduardo Paredes, compositor del huaino “Likan Antay, mi raza”, comenta desde Calama que “estar dentro de una selección tan competitiva, es un bonito logro. Estamos un poco nerviosos, pero contentos de ir a participar, conocer gente y entablar nuevas amistades independiente del resultado”.
GANADORES ANTERIORES
Entre los competidores, destacan algunos que ya saben lo que es alzarse con el máximo galardón del Festival. Tal es el caso de Catalina Celedón, quien ganó el trofeo en 2023 y llega este año con una composición en neo-folclore titulada “Una nueva tierra”.
La artista señaló que “para mí, participar en el Festival de Molina es muy especial e importante al ser uno de los escenarios y eventos con renombre a lo largo del país, a nivel de competencia y calidad de participantes”. Sobre su canción, revela que “transmite un mensaje de paz, unidad y sanación histórica, denunciando la violencia y el sufrimiento que han marcado a la humanidad durante siglos. Ofrece una visión esperanzadora de una nueva tierra donde los corazones se unan sin banderas, las generaciones sanen sus raíces y rechacen la guerra. Un llamado a la conciencia colectiva y el despertar de una nueva era”.
Otro que sabe lo que es alcanzar el primer lugar en Molina es Agustín Moncada, quien afirma emocionado que “ir a Molina y al Festival de la Vendimia es como retornar a nuestra casa, la que comenzamos a querer desde nuestra primera participación en el año 1987. En estos 38 años, hemos vuelto muchas veces y hemos logrado todos los premios que entrega el Festival”.
Sobre su retorno a tierras molinenses, el autor de “La obrera de la vida y la flor” comenta que “nos enorgullece y alegra volver cada vez que podemos porque es parte de nuestra historia desde los orígenes. Lo que nos motiva a regresar a Molina, es, sencillamente, Molina”.
CANCIÓN LOCAL
Representando a la comuna, el tema seleccionado de Molina este año es “Hijos de la lucha ardiente”, obra de Jesús Retamal. El crédito local indicó que “encontramos una oportunidad y un desafío, pues como grupo teníamos curiosidad de ver cómo afrontaríamos la creación de una canción relacionada al folclore, ya que nunca habíamos hecho nada parecido”.
Sobre sus expectativas, explica que “haber sido seleccionados como representantes de Molina en la competencia nos resultó una sorpresa muy gratificante y queremos hacerlo lo mejor posible”.
INVITACIÓN
El alcalde de Molina, Felipe Méndez, hizo la invitación “a toda la familia para disfrutar no solo del atractivo de los artistas nacionales invitados, sino que también a deleitarse con estos grandes competidores que, con mucho esfuerzo y dedicación, se han preparado durante prácticamente todo el año para llevarse el premio máximo de nuestro Festival”.
Cabe destacar que el último molinense en alcanzar el máximo trofeo del Festival Folclórico de la Vendimia fue Rolendio Fernández, hace ya más de diez años.
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