Estimaciones. “Efectivamente puede ser que tengamos un problema de escasez de agua durante el verano”, señaló al respecto el secretario ejecutivo de la Junta de Vigilancia del río Lontué, Diego Castro.
CURICÓ. Según las estimaciones que por estos días se manejan, sobre la base de algunos factores, alrededor del 15 de enero se debería presentar una significativa baja en el caudal del río Lontué. Así lo dio a conocer en conversación con diario La Prensa, el secretario ejecutivo de la Junta de Vigilancia del río Lontué, Diego Castro.
Tomando en consideración, por ejemplo, la cantidad de nieve acumulada y el calor que se está presentando, Castro señaló que “efectivamente puede ser que tengamos un problema de escasez de agua durante el verano”. “Nosotros estimamos que vamos a tener condiciones relativamente estables hasta el mes de enero. Alrededor del 15 de enero, creemos que vamos a tener una baja significativa en el caudal”, dijo.
RECOMENDACIONES
El abogado agregó que “mientras no tengamos embalses, es muy poco lo que podemos hacer”. En tal contexto, Castro recomendó “tratar de sacar las cosechas lo antes que se pueda, tratar de sacar los trigos, los maíces lo antes que se pueda, ser cuidadosos en el uso del agua, utilizar sistemas de riego un poco más tecnológicos que mecanizados”, entre otras acciones.
Cabe recordar que la zona central de nuestro país ya acumula 14 años consecutivos de sequía, con restricciones. Eso sí, esta vez la cantidad de precipitaciones estuvo mucho más cercana a lo que se debería presentar en un año “normal”. “Un año normal en la zona nuestra es del orden de los 653 milímetros, este año llovieron como 550, algo así”, dijo.
OLA DE CALOR
Si bien por estos días se está presentando una “ola de calor”, Castro indicó que según los datos de los que se tiene conocimiento, corresponde a un fenómeno que registra precedentes dentro de al menos los últimos 30 años. De hecho, de acuerdo a tales registros, el río Lontué llegó a transportar 130 metros cúbicos, “lo cual es una cantidad impresionante”, escenario que estaba respaldado por “una pluviometría y una nieve muy significativa”.
EMBALSE
Una “solución” a este tema que por años se ha dado a conocer, pero que a la fecha no presenta mayores novedades, es la relacionada a la construcción de un embalse. Se trata de una materia, dijo Castro, por la que “hay que seguir insistiendo”, que, por los tiempos, probablemente en lo personal, no va a poder verla.
Sobre la posibilidad de construir un embalse, recalcó que “siempre estamos conversando con las autoridades de turno”. “Espero que, si Curicó quiere seguir con vocación agrícola, quiere seguir dedicándose a la fruticultura, se debe hacer un embalse. Si estamos de acuerdo que hay un cambio climático, si estamos de acuerdo que cada vez va a llover menos, de que la nieve se va acumular a mayor altura, que los periodos de lluvia van a ser más intensos, más concentrados, es decir, que en un día llueva lo que podría llover en 10 días, si sumamos todos esos factores, no hay otra alternativa. A menos que queramos dedicarnos a otra cosa”, indicó.
Si bien por el lado del río Teno quizás habrían “mayores avances”, todo dependerá si los respectivos territorios a utilizar adquieran cierta protección.
Por el caso del río Lontué, Castro recordó que años anteriores existió la posibilidad de que inversores extranjeros hubiesen facilitado los recursos necesarios, idea que se desechó. “Esos mismos chinos que nos ofrecieron a nosotros, se fueron para Argentina, llegaron a un acuerdo con el señor (Mauricio) Macri y terminaron haciendo un embalse, que es el más grande que se ha hecho en la Argentina para riego”, concluyó.